Un paro cardíaco se lleva al legendario cantante y guitarrista Snooks Eaglin (Nueva Orleans, 21 de Enero de 1936 – 18 de Febrero de 2009).
El rey de la improvisación, una de las voces más dulces y personales, un peculiar estilo como guitarrista (autodidacta) y una pasión infinita por la música son las características más representativas de este gran músico. Tenía 72 años. Toda una vida dedicada a la música y un enorme legado de canciones y versiones, más de 2000 en su repertorio.

No puedo evitar llevar esta noticia a un terreno más personal, este hombre formaba parte de mi vida cotidiana desde hace mucho tiempo:  Uno de mis músicos favoritos, imprescindible, de los que necesito escuchar a diario. Mi «curandero» personal. Si suena Snooks en mi equipo no hay nada más alrededor. Tenía la esperanza de escuchar a este hombre en directo e incluso estaba segura de que sería este año.

Si el movimiento se demuestra andando he aquí un ejemplo de la gran pérdida. Nos queda el consuelo de su legado: