Entre los músicos que van un poco más allá de la forma tradicional de tocar la armónica de blues y siempre en una contínua investigación de este instrumento está Joan Pau Cumellas. No contento con esto prepara también el taller internacional de armónica de Roses que este año celebrará su tercera edición. Vamos a adentrarnos en el mundo de la armónica de la mano de Cumellas. Gracias Joan Pau. 1 ¿Como empezó tu interés por la armónica y por qué te atrae este instrumento? Antes de conocer a los armonicistas de blues descubrí este instrumento en discos de folk como los de Neil Young y Bob Dylan. Aunque en estos casos la armónica tiene un papel menor, ya sentí atracción por su sonido. Con mi primera armónica jugaba intentando copiar sus canciones. Disfrutaba simplemente con esas melodías sencillas y sus acordes. Poco a poco fui adquiriendo algunos discos de blues y country y mi interés hacia este instrumento fue en aumento. En ese tiempo descubrí a Victor Uris en un concierto con su banda ‘L’harmònica Coixa Blues Band’. Me impresionó mucho como conseguía ser el protagonista en medio de una gran banda de músicos con este objeto tan pequeño. Como si hubiera tenido una revelación, salí de ese concierto decidido a aprender a tocar seriamente la armónica. La armónica permite acercarse al mundo de la música de una manera fácil y sin necesidad de conocimientos previos. Puedes tocar canciones desde el primer día que tienes una. Y con solo un poco de esfuerzo más, ya puedes estar tocando un blues sencillo. Este factor me ayudó a seguir motivado desde el principio. De otro lado, me atrae de la armónica que detrás de su aspecto de juguete inofensivo guarda una potente fuerza de expresión musical. Comparado con otros instrumentos parece un objeto limitado, pero en la práctica demuestra una gran versatilidad para expresar emociones. La armónica lanza sus notas y conecta rápidamente con la audiencia. Quizá tenga algo que ver que su registro guarda similitudes con el la voz humana y eso genera una atracción entre el intérprete y el público que pocos instrumentos logran.Además puedes hacer todo eso sin mostrarla, escondiéndola entre tus manos. Como si de un objeto mágico se tratase. Otro buen motivo para tocarla!.2.1 ¿Cuáles fueron tus influencias al principio?
Como la mayoría de aficionados a la armónica empecé guiándome por lo que escuchaba en discos. En lo referente al blues, las primeras grabaciones que tuve eran de armonicistas de nuestro país como Victor Uris, Ñaco Goñi, Mingo Balaguer y Antonio Cáceres. Luego, lógicamente, fui descubriendo clásicos como Sonny Boy Williamson I y II, Little Walter, Walter Horton, Sonny Terry, etc. Este último me atrae especialmente por su modo de combinar ritmo y melodía. De todos modos, he estado abierto a todo tipo de influencias. Desde los antiguos De Ford Bailey y Noah Lewis hasta los modernos Carlos del Junco, Greg Zlapzcynski o Antonio Serrano, pasando por Paul Butterfield, Sugar Blue, Tam Ball o Kim Wilson. Otros armonicistas que me han gustado mucho son Charlie McCoy, Norton Buffalo y Jean Jacques Milteau.
2.2 ¿Cuáles son tus influencias actualmente? Actualmente, investigo sobretodo escuchando otros instrumentos. En el campo del blues, por ejemplo, hay ideas melódicas de saxofonistas, guitarristas, etc, que funcionan muy bien trasladadas a la armónica.Igualmente, me dejo influir mucho por los músicos con los que toco habitualmente. En el caso de Mr.Hurricane Band, por poner un ejemplo, trabajo junto al guitarrista trasladando melodías de un instrumento al otro y con esto ensayo recursos nuevos continuamente.
Hace años que toco y grabo discos con grupos de bluegrass y música celta. Estos estilos de música son muy exigentes melódicamente y me han marcado mucho también en mi modo de tocar.
Igualmente, hago algunos conciertos con músicos de jazz tradicional especializados en Gypsy Swing. Aunque este campo obliga a forzar el instrumento un poco más que en el blues, estoy encantado de descubrir que la armónica diatónica encaja bien en este tipo de música.
3 ¿A qué edad empezaste a tocar?
Tuve mi primera armónica a los 18 y hacia los 20 hice el primer concierto.
4 ¿El mejor armonicista?
Cualquier armonicista que he menciono en este cuestionario, y tantos que me dejo, es para mi único e interesante en algún aspecto. Los más antiguos, ciertamente, poseen el encanto de toda una época que ya no existe. Son los primeros y han sido referentes para el resto. Son inimitables. De todos modos, continuamente descubro músicos sorprendentes que podrían ocupar un lugar preferente en esa lista de los mejores.
5 ¿Cómo ves el futuro del blues?
En mi modesta opinión, mientras haya interés por la buena música creo que el blues seguirá vivo. Su carácter universal es incontestable. El blues está presente en todo el mundo y conecta de modo natural con las audiencias más variadas. Nació como una forma de expresión popular, dónde las emociones juegan un papel primordial, y su mensaje viaja por canales que todos podemos sintonizar fácilmente. Del mismo modo que hoy día seguimos escuchando a bluesmen que existieron hace casi un siglo, es muy probable que dentro de cien años alguien siga interesado en ellos.
Dicho esto, pienso que para mantener el blues vivo no basta con seguir a los clásicos. El blues también se mantiene vivo y se enriquece con las nuevas formas que le imprimen algunos músicos actuales. Yo apuesto por estar abierto en este sentido. Buscar nuevas maneras de tocar blues puede ser una garantía para que el blues siga en forma durante mucho tiempo.
6 ¿Qué equipo utilizas?
En la mayoría de mis actuaciones toco de manera acústica con el micro normal de voz. Cuando quiero saturar el sonido me sirvo de un pedal-previo Mesa Booggie de válvulas y un micro ligero de los que se usan para batería. Tengo un par de amplificadores de válvulas y micros de armónica clásicos, pero solo los uso en ocasiones puntuales.
7 ¿Qué disco consideras tu disco de cabecera en el aprendizaje?
Tengo muchos y es imposible reducir la lista a uno. Para poner alguno te diré que yo he disfrutado mucho discos como Fine Cuts de Walter Horton, Whoopin’ de Sonny Terry y Johny Winter, Harpin’ de Blues de Charlie McCoy, Better days de Paul Butterfield, Blues Harp de Jean Jaques Milteau o el Big Boy de Carlos del Junco.
8 ¿Cual es el armonicista que más te ha sorprendido en directo?
La lista de los que me gustaría presenciar en directo supera infinitamente a los que sí he tenido ocasión de ver. Muchos de ellos nunca han visitado nuestro país.
De todos modos, el concierto que Tom Ball, junto a Kenny Sultan, nos ofreció en Barcelona hace años es de los que más me ha impresionado. En su manera de tocar hay destellos de Sonny Terry y Walter Horton, así como fraseos de jazz tradicional llenos de síncopas sorprendentes. Tom Ball es realmente un armonicista muy original.
También he quedado impresionado con la fuerza de Kim Wilson. En sus directos suele hacer un solo de armónica de unos 15 minutos, sin ningún tipo de acompañamiento, que no decae en ningún momento. Espectacular.
9 ¿Tus garitos preferidos del país para tocar?
Cualquiera donde haya buen ambiente y gente con ganas de disfrutar de la música en vivo. A veces, el peor antro puede convertirse en el lugar más idóneo para tocar.
10 Un consejo para los foreros amantes de la armónica
La mayoría de armonicistas somos autodidactas y eso es positivo en el sentido de crearse un estilo personal. De todos modos, suele pasar que si uno no recibe un poco de orientación queda estancado en unos pocos recursos que siempre se repiten. Sobretodo en el momento de tener que improvisar.
Hay varios libros y cd’s pedagógicos en el mercado, pero te puedes ahorrar mucho tiempo si puedes recurrir a algún músico experto. Al menos para orientarte en lo más básico del instrumento.
En este sentido, más que recomendar libros, aconsejo comprar buenos discos y, si es posible, tomar alguna lección de un profesor de armónica.
Internet es también una fuente muy interesante de información para todos los que están interesados en tocar este instrumento. Empezando por la que dais aquí en la Taberna y pasando por otras páginas como www.harmonicaspain.com, uno puede conseguir material (discografía, entrevistas, documentos, etc) muy útil para orientarse en este campo.
11 ¿Has salido al extranjero a tocar? En caso afirmativo, ¿qué tal la experiencia? ¿cómo es la cultura musical del país en concreto?
Sí. He tocado sobretodo en Francia y puntualmente en Irlanda, Argentina y en San Diego (California).
En Francia he estado en seis festivales diferentes y mi experiencia ha sido siempre muy positiva. Lo que más destacaría es la importancia que tiene allí la música. Hay un respeto por los músicos que aquí no existe. Las instituciones apoyan y cuidan a los artistas. Existen numerosos programas de radio, revistas especializadas y hay más grupos de blues que aquí. Los festivales se llenan de un público muy heterogéneo que ama la música. Allí, como detalle, es habitual ver padres con hijos de 10 años en un concierto de blues o jazz. Ver niños en conciertos de blues escuchando con atención es una cosa que me ha impactado mucho.
12 ¿Cuál ha sido tu experiencia más emocionante sobre un escenario?
Como cualquier otro músico he pasado situaciones de todo tipo. Una muy divertida y emocionante fue, curiosamente, la de mi primera experiencia encima de un escenario. Pasó en un gran centro universitario donde se celebraban diferentes actividades artísticas (conciertos, teatro, exposiciones, etc.). Yo era uno más del público. Cuando todo terminaba y me disponía a marchar, me metí casualmente en un gran auditorio vacío. Como no había nadie se me ocurrió sacar la armónica y subir al escenario a tocar un poco. Nunca antes había tocado con nadie ni mucho menos subido a un escenario.
Apareció un amigo y se sentó en medio del patio de butacas. La situación era ideal para bromear simulando que yo tocaba delante de un público que mi amigo representaba. Así que él empezó a aplaudir y a hacer sonidos de ambiente mientras yo actuaba en el escenario. Fingíamos cómicamente el gran concierto cuando en realidad estábamos solos.
El ruido que hacíamos atrajo, al rato, otra persona que pasaba cerca del auditorio. Esta entró y se sentó. Yo dudaba entre seguir tocando o bajar del escenario, pero esta persona me animó a seguir. Al cabo de unos minutos, otras personas que también circulaban cerca de la sala, entraron, se sentaron y me animaron también a seguir soplando la armónica. Nunca había tocado delante de nadie, pero logré improvisar unos blues con ritmos a la ‘room to move’ de John Mayall.
Era tarde y la Universidad había terminado todos los actos artísticos. De repente corrió la voz de que alguien estaba actuando en el auditorio. En diez minutos toda la gente que quedaba en el centro se acercó y llenó todas la butacas del auditorio. Ahora el lugar estaba realmente completo. Conseguí vencer el miedo y seguí tocando inventando cualquier cosa. Un tipo logró encender los focos del escenario y conectó un par de micrófono del equipo de la sala. Como por arte de magia subieron unos músicos al escenario. Eran los del concierto que yo había presenciado en la Universidad!. Se habían enterado que pasaba algo en el auditorio y no dudaron en apuntarse. El guitarrista instaló su amplificador, el baterista montó su batería y un tercero que se puso a tocar el piano del auditorio. También se añadió un cantante. Increíblemente se había formado una banda al completo junto a mi. Toqué con ellos improvisando temas de rock y blues. El público que se había juntado allí espontáneamente aplaudió animadamente todo el rato de concierto. Creo que pudimos tocar más de una hora hasta que finalmente apareció la policía y nos obligó a desalojar el lugar.
Lo que había empezado como una broma terminó siendo el concierto más mágico de mi vida.
13 ¿Vives de esto?
Si, tengo la suerte de poder vivir de mi pasión.
A parte de ganarme la vida con los conciertos y las grabaciones, dedico parte de mi tiempo a la docencia de la armónica haciendo clases un día a la semana en Barcelona. También hago sesiones pedagógicas para grupos de niños en escuelas de Cataluña y talleres prácticos a lo largo del año en festivales y demás eventos.
Con tu permiso, aprovecho para decir que de entre estos talleres, destaca el que hacemos Greg Zlapzcinsky y yo mismo cada verano en el Festival de Blues de Roses. Es un taller internacional dirigido a armonicistas que ya tocan. En este taller aprenden desde teoría y improvisación práctica hasta técnicas avanzadas. Más abajo dejo una dirección de correo electrónico para los que quieran informarse.
14 ¿Customizas tus armónicas? si es así ¿qué diferencia de sonido encuentras entre una customizada y una normal?
Tengo algunas armónica customizadas, pero en general uso los modelos convencionales sin hacerles grandes modificaciones. Lo que sí suelo hacer es ajustar la separación de las lengüetas respecto la placa que las soporta. Es habitual que los modelos salidos de fabrica presenten desigualdades en este punto. Es un arreglo muy simple que mejora bastante la respuesta del instrumento tanto para obtener los bendings como para obtener los overblows-overdraws. Conozco otras mejoras pero son más largas de aplicar y el resultado no siempre justifica su uso.
Algunas de las armónicas customizadas por profesionales que he probado son muy buenas en cuanto a volumen y brillo en el sonido. Estos modelos que conozco tienen el interior muy bien sellado de manera que aprovechan eficazmente el flujo de aire. De todos modos, son caras y para mis necesidades me basta con los modelos sencillos que compro en la tienda.
15 ¿Como ves el panorama armonicista nacional?
En mi entorno geográfico cada día descubro más personas interesadas en este instrumento y en general creo que hay más y mejores armonicistas que años atrás. Algunos podrían dedicarse profesionalmente a esto porqué poseen un gran nivel. Desgraciadamente, la realidad cultural y social de nuestro país les complica mucho el tomar esa decisión.
De todos modos, sí que hay más bandas con armonicista que antes. Al menos como profesor tengo el placer de tener en mis clases chicos y chicas que tocan muy bien y que se animan a montar sus propios grupos. Esto me hace pensar que el panorama en general mejora poco a poco.
16 ¿Te gustaría comentar y/o añadir algo relacionado con el mundo de la armónica en particular o del blues en general?
Siguiendo con el tema de antes, lo cierto es que vivir de tocar blues y estilos similares en España es todo un reto. Es una situación de lucha diaria que frena el impulso de algunos músicos excelentes por dedicarse exclusivamente a su instrumento. Esto lo veo constantemente y, aunque yo me siento afortunado de poder ganarme la vida con la armónica, reconozco que la figura del músico profesional no es suficientemente valorada en nuestro entorno social. Por este mismo motivo, todos aquellos que en nuestro país apoyan a los músicos, organizando conciertos, festivales, webs, etc., tienen un valor añadido respecto a los de otros países teniendo en cuenta que casi van contracorriente.
17 ¿Tu música, como la del último disco «Hard Driving», es una búsqueda más allá del típico blues tradicional, el no quedarte nunca estancado?
Mi manera de tocar supongo que no sigue los patrones tradicionales del armonicista clásico. Del mismo modo que escucho blues de Chicago, también me gusta investigar en otros estilos. Realmente, tal y como tu dices, trato de no quedarme estancado nunca. Intento variar constantemente y por lo tanto siempre estoy buscando, y robando!, ideas de todas partes. En este sentido me siento bastante ecléctico. Aunque sea variando una sola nota, trato de tocar una misma canción de forma distinta en cada ocasión.
En el cd de Mr.Hurricane Band ‘Hard Driving’, a parte de blues, hay mucho de esa inquietud por investigar las posibilidades de la armónica en otros terrenos.El uso de los ‘overblows’, que abre el campo de acción de la armónica diatónica, también me ha permitido llegar más lejos en el aspecto creativo.
18 ¿Tienes en mente algún nuevo disco con Mr. Hurricane Band?
Actualmente estamos trabajando temas nuevos para lo que sería nuestro tercer cd. Si todo sale como deseamos estará grabado antes del verano del 2007.
Joan Pau Cumellas – Enero 2007